EL TDAH



El TDAH o trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad es un trastorno de comportamiento de origen neurológico por desequilibrio de algunos neurotrasmisores del cerebro. No se produce cantidad suficiente de noradrenalina, neurotrasmisor responsable de controlar el pensamiento y la capacidad de inhibición.

 El niño-adolescente-adulto es movido, inquieto y desatento porque no puede dejar de serlo.


 


Normalmente se manifiesta antes de los 7 años. Un 5% de la población infantil padece este trastorno. Es más habitual en niños y en hombres, y es altamente hereditario.


 


Los síntomas principales en el déficit de atención son: la dificultat de prestar atención y concentrarse, les cuesta organizarse en las tareas diarias, seguir instrucciones, recordar detalles y son distraídos.
Cuando hay hiperactividad se muestran inquietos, corren cuando no deben, les cuesta estar sentados, interrumpen contínuamente, hablan mucho y les cuesta controlar su conducta.
Son impulsivos y actúan antes de pensar, interrumpen conversaciones, les cuesta mantener el turno de espera y responden antes de tiempo. 
Normalmente el trastorno se presenta combinado, la dificultad de prestar atención y la hiperactividad, por lo que comporta problemas en el aprendizaje y en la conducta. Un diagnóstico y tratamiento precoz evita problemas académicos, fracaso escolar, inadaptación social y problemas emocionales.


 



El tratamiento es médico, con piscoestimulantes, dados bajo un riguroso control médico, que mejoran la capacidad de atención, concentración e impulsividad. También es importante el tratamiento pedagógico y la terapia psicosocial, instaurando buenos hábitos educativos desde la familia y la escuela.

Por ello es básico la detección precoz, atendiendo a criterios clínicos en diferentes situaciones de la vida diaria.

En casa, es básico tener bien instaurado un organigrama de rutinas y deberes, reglas de conducta, así como valorar el esfuerzo y recompensar situaciones positivas.



Consejos a los padres:
-Informarse sobre el TDAH.
-Establecer reglas y recompensas.
-Ayudar a establecer rutinas.
-Eliminar distractores.
-Evitar cambios inesperados.
-Motivarlo para alcanzar unas metas.